Los vecinos y el rescate de una vieja estación en La Plata

El antes y el después- Cultura "a pulmón" en una barriada da La Plata

Barriada al sur de La Plata

Omar Giménez
PERIODATA

En "Silla en la Vereda", una de sus aguafuertes, Roberto Arlt celebra el encanto de los viejos barrios, ésos del espacio público compartido y la charla crepuscular entre vecinos. Meridiano V es una barriada ferroviaria ubicada en el sur de La Plata, donde se alude a ese texto para describir el espíritu que inspiró el cambio vivido por el lugar en los últimos años, cuando dejó de ser un rincón olvidado para convertirse en una referencia de la cultura local en base al trabajo sostenido de los vecinos, que acaban de integrar las propuestas vigentes en un circuito cultural.

Algunos de los protagonistas de la iniciativa -Nora Rugallo, Juan Montici, Abel Gutiérrez, Daniel Badenes, Miguel Ángel Yamul y Julieta Lloret- explican que todo sucedió a partir del interés por recuperar los lugares que daban identidad a la zona y generar desde ellos actividades capaces de recomponer el tejido social y mejorar la calidad de vida barrial, a contramano de una era de casas enrejadas, mirillas alertas y desconfianzas a flor de piel. Dos referencias ilustran lo intenso de la movida que desde 1998 se vive alrededor de la vieja estación recuperada en la esquina de 17 y 71: en noviembre del año 2007, 700 artistas expusieron su trabajo durante 20 días en el marco de la cuarta edición de una Muestra Ambulante que se desarrolló en bares, negocios, garajes y veredas del barrio, y fue visitada por más de 10.000 personas. Antes, la tercera edición del Encuentro Nacional de Teatro Comunitario reunió durante dos fines de semana a más de 1.100 actores-vecinos de todo el país.

A esas actividades se suman las habituales de una geografía siempre inquieta: recitales, espectáculos teatrales, ferias de diseño, intervenciones urbanas, talleres, edición de libros y revistas y hasta acrobacia aérea. Las iniciativas incluyen el rescate de la historia oral, preservada por los vecinos más antiguos. Esta historia dice que el barrio nació alrededor de la estación del "Ferrocarril Provincial al Meridiano V", y vivió su época de esplendor entre 1935 y I960, cuando por su trocha angosta circulaba un tren cada 55 minutos. Entonces tenía una intensa actividad comercial y era una de las puertas de entrada a La Plata. Pero en 1977, en plena dictadura militar, dejaron de rodar los trenes, con lo que la zona entró en un profundo letargo del que la sacó "la voluntad vecinal de no morir con el ferrocarril".

En 1985 se hicieron los primeros esfuerzos aislados por intentar recuperar la estación abandonada. Ya en los 90, la iniciativa tomaría un color decididamente cultural con la irrupción de grupos como "La Grieta*' o el Centro Cultural "La Vieja Estación", integrados por hijos y nietos de ferroviarios y orientados al rescate de los espacios públicos históricos para actividades culturales. En el marco de un paisaje de antiguas farolas y calles adoquinadas que parece detenido en el tiempo, la larga lista de protagonistas sumó otros nombres: "El Viejo Almacén El Obrero"; el grupo "El Faldón"; las ferias "en la Esquina" y "de Mujeres Emprendedoras"; la escuela de percusión "Batuquelé"; las intervenciones urbanas de "Figurones" o la acrobacia aérea de '"Séptido".

Los bares con espectáculos convertidos en clásicos, como "Ciudad Vieja", "Mirapampa", "Imperio" o el restaurante "Edgardo" (el mismo de la canción "Lluvia Dorada", de Sergio Pangaro), completan un circuito que cuenta con apoyo municipal y que ahora va por mas: "atraer vecinos de otros barrios, generar empleo y contribuir desde el arte a la construcción de una sociedad más justa", dicen los protagonistas. Una historia que mezcla la solidaridad y la nostalgia.

Fuente: Nota publicada en el suplemento aniversario de la Revista Ñ
"La vuelta a la cultura en 80 mundos" (25 de Octubre de 2008)